domingo, 24 de agosto de 2014

CORONACIÓN CANÓNICA PONTIFICIA DE LA VIRGEN DE ALHARILLA

     La noche de ayer fue el gran día en el que en Porcuna se celebró con gran solemnidad el ansiado acto de la Coronación Canónica Pontificia de Nuestra Señora de Alharilla. La Coronación Canónica es un rito católico instituido en el siglo XVII con el objetivo de resaltar la devoción mariana de una advocación y consiste en la imposición de una corona en la imagen.
     La Cofradía de Ntra. Sra. de Alharilla de Porcuna teniendo en cuenta ante todo la devoción existente en los pueblos de la Campiña que cuentan con cofradía como Porcuna, Arjona, Arjonilla, Escañuela y Lopera, para su actualización y extensión del culto a la Virgen de Alharilla, acordó solicitar del Santo Padre la autorización para llevar  cabo la coronación de la imagen a la que se rinde culto en el poblado de Alharilla. Tras la autorización del Papa Francisco I se comenzaron múltiples trabajos que desencadenaron en un elevado número de actos entre los que hay que destacar hasta ahora las visitas de esta imagen a los pueblos de Arjona, Arjonilla y Escañuela.
     El acto culmen tuvo lugar en la noche de ayer con una elevada presencia de devotos que se congregaron el el Paseo de Jesús de Porcuna, donde el Obispo de la Diócesis, Ramón del Hoyo López, llevó a cabo la coronación en el transcurso de una celebración eucarística.
     Arjonilla estuvo allí representada por la Cofradía de Ntra. Sra. de Alharilla con su Junta de Gobierno y Hermanos Mayores , que estuvieron también acompañados por  representaciones de las cofradías Jesús Nazareno, Jesús de la Humildad, San Juan Evangelista, Ntra. Sra. de la Soledad, Ntra. Sra. del Rosario y Ntra. Sra. de la Cabeza.
















 






























 
 
 
 
Cofradía Ntra. Sra. de Alharilla de Arjonilla
 
 
 
 
 
Cofradía de Ntra. Sra. del Rosario
 
 
 
Cofradía de Ntra. Sra. de la Soledad



 

Cofradía de Ntro. Padre Jesús de la Humildad
 
 
Cofradía de Ntra. Sra. de la Cabeza




Cofradía de Ntra. Sra. de la Cabeza