lunes, 11 de agosto de 2014

EL VOTO A SAN ROQUE EN 1602

      En publicaciones anteriores hemos visto cómo Arjonilla se encontró afectada de la peste y las medidas tomadas para librarse de la misma como el aislamiento del pueblo y la instalación de una enfermería. Además de ello, igual que en otros muchos lugares se recurrió a la intercesión divina, en este caso personificada en San Roque, que había tomado fama a nivel mundial de sanador de enfermedades contagiosas como la peste. Los representantes del cabildo de Arjonilla recurrieron a la fórmula del voto-promesa a cambio de la intersección del santo. Así el 20 de mayo de 1602 aprobaron el Voto a San Roque, por el cual ellos en nombre de todos los arjonilleros se comprometían a celebrar fiesta solemne con misa cantada y procesión de San Roque, hacer ayuno y tener la ermita en pie y decente.
     Este voto fue refrendado por el poder religioso personificado en el prior de la parroquia, Jerónimo Díaz.
     El acta de la sesión de ese día recoge este voto que al encontrarse hace años en malas condiciones, se llevó hasta Sevilla para ser restaurado por el Instituto Andaluz de Patrimonio Histórico y desde su regreso quedó guardado en una caja de seguridad en el Ayuntamiento. Hace unos días se me facilitó el acceso al mismo para reproducirlo para los lectores de la Crónica de Arjonilla.
     Su transcripción la podéis leer en el artículo que publiqué sobre el mismo en el Programa de Festejos del año 2002 o en el libro San Roque, Patrón de Arjonilla, de Ildefonso Rueda Jándula.