Esta tarde la iglesia parroquial de la Encarnación se ha llenado por completo de fieles arjonilleros que han acudido al acto de bendición de las rosquillas en la festividad de San Blas. Calculo que aproximadamente el número de personas que se encontraban en el templo parroquial estaba en torno a las 600. Y teniendo en cuenta la gran cantidad de roquillas que algunos/as llevaban, podemos cifrar en varios miles el número de rosquillas que ha sido bendecidas.
El párroco, Ángel Sigüenza Fuentes, comenzó el acto explicando a los presentes y recordando que la bendición de las rosquillas se hace en petición a San Blas de protección para nuestras gargantas, aunque también expresó su deseo de que sirviera para que fuéramos correctos en nuestras expresiones, utilizando para ello siempre la verdad de las cosas.
